Este templo ha sufrido varias modificaciones a lo largo de la historia. Del primitivo edificio, construido en el siglo XVII sobre los restos de otro anterior y bajo la advocación de San Miguel únicamente se conservan la torre y una de las capillas.
Los rasgos actuales corresponden a una reconstrucción de 1948 en base a una estética neorrománica, con planta rectangular, tres naves y ábside semicircular. El tramo del crucero se corona con una cúpula sobre trompas al estilo de la de San Martín de Frómista, Santillana del Mar o Castañeda.
La fachada presenta portada con arquivoltas, adelantada sobre el hastial flanqueado por torres semicirculares.
La decoración interior se centra en el ábside, con un friso escultórico del apostolado, y en los capiteles de los pilares. Es destacable un cristo de piedra obra del genial escultor cántabro Jesús Otero.
Otros monumentos y lugares de interés cercanos:
- Palacio de los Gándara, Villabáñez
- Colegiata de Santa Cruz de Castañeda, Socobio