Valles Pasiegos. El Secreto de Cantabria

Ubicación general: En el tramo de cabecera del río Miera, se localiza a 43 Km de Santander. Limita al norte con Miera, al oeste con Villacarriedo, y al sur con Vega de Pas y la divisoria cántabro-burgalesa, atravesada por el Portillo de Lunada. Nº habitantes: 466 Extensión: 35,7 Km2 Altitud: 380-1510 m. Localidades: Carcabal, La Concha, Merilla y La Pedrosa (capital municipal) Fiestas populares: mayo (La Ascensión -La Pedrosa), marzo (Los Dolores -Merilla), 16 agosto (San Roque -La Pedrosa), último sábado agosto (El Sagrado Corazón -Carcabal), 1º sábado septiembre (Fiesta del Urgullu Pasiegu -La Concha), 12 octubre (El Pilar -La Pedrosa)

La disposición de las capas geológicas del angosto valle del Miera, inclinadas al este, ha otorgado a las laderas una forma asimétrica, con la vertiente occidental menos inclinada que la oriental, que posee además mayor altitud. El tramo alto del valle del Miera se asienta en un valle glaciar labrado durante la última glaciación de Würm hace 10.000 años. El pueblo de La Concha marca el punto hasta donde alcanzó la lengua de hielo, y a partir de ahí, aguas abajo, se estrecha. Comparado a otros lechos glaciares de la región, posee muy poca altitud. La acción del hielo, limando el fondo y las paredes, le confiere la forma transversal en "U" característica de estos valles.· El modelado glaciar también se manifiesta en los aterrazamientos procedentes de depósitos morrénicos sometidos a posterior excavación fluvial, cuya orografía facilita la organización de las parcelas, en suelos favorables a la explotación de los ecosistemas pratenses. A los prados y pastos, dominantes sobre todo en la vertiente oriental, completamente deforestada para el pasto, acompaña un pequeño bosquete de ribera de porte arbustivo con mayoría de avellanos, robles y fresnos. La vertiente occidental presenta algunas manchas de árboles caducifolios. También se aprecia la plantación de hileras de árboles o de árboles sueltos -por lo general, robles o fresnos- en numerosas parcelas. Además del hecho de que todo el curso del río Miera está catalogado como LIC (Lugar de Importancia Comunitaria) como enclave de hábitat de interés dentro de la Red Natura 2000, este municipio comparte con Soba el espacio incluido dentro del LIC denominado Montaña Oriental, que se extiende entre la sierra del Hornijo y los portillos de Estacas de Trueba (Vega de Pas), Lunada, y la Sía (Soba).

-Patrimonio arqueológico: Los principales testimonios arqueológicos existentes en el término de San Roque de Riomiera son la cueva de Covallarco y la de Cascajosas, ambas en Merilla. La primera, bien conservada, alberga un viejo horno de cal y una estructura de cierre, además de diversos restos óseos y líticos de origen prehistórico. -Arquitectura religiosa: destacan la iglesia de San Roque en La Pedrosa, sencillo templo del siglo XVI; y la Ermita de Ntra. Sra. de los Dolores de Merilla, interesante santuario de grandes dimensiones levantado en mampostería y cubierto con lastras, al igual que las cabañas del entorno. -La cabaña pasiega: En el municipio hay ejemplos de los siglos XVII al XIX en Merilla y La Concha, en los parajes de Bernallán, La Brena, El Coburco, La Lunada y El Toral. El modelo prototipo es un bloque de planta rectangular y dos alturas. El superior, llamado payo, se destina a almacenar la hierba segada y el inferior a guardar los animales. Está construido con materiales locales, con entramados de madera y muros levantados en mampostería irregular. El tejado se compone de lastras. -Patrimonio industrial. El Resbaladero de Lunada: Durante la Edad Moderna los habitantes del valle estuvieron supeditados al funcionamiento de las Reales Fábricas de Cañones de Liérganes y La Cavada. En el siglo XVIII y principios del XIX, se acometieron obras de gran envergadura, entre las que se incluye la sillería de unas esclusas levantadas en La Concha y, sobre todo, un resbaladero de troncos construido en 1791 y localizado junto al portillo de Lunada. Consta de una base de casi un kilómetro (desaparecida en varios tramos), sobre la cual iba montado un canal de madera. Su finalidad era acelerar el transporte de troncos procedentes de las zonas más elevadas. A sus pies se encuentra la llamada "casa del Rey", que sirvió de almacén y servicio a los trabajadores del resbaladero. El resbaladero fue incluido en 2003 en el Inventario del Inventario General del Patrimonio Cultural de Cantabria.

Más de la mitad de la población activa trabaja en las explotaciones pecuarias, orientadas en su mayoría a la producción de leche de vacuno de raza frisona, aunque el municipio mantiene una densa cabaña de caprino. En cuanto al sector servicios, la mayor parte de los establecimientos se concentran en La Pedrosa, vinculados a su capitalidad administrativa. La población de La Concha está, sin embargo, conviertiéndose en un fuerte reclamo de turismo rural tras la instalación del Museo La Casa del Pasiego y la reciente apertura de un excelente hotel-restaurante.

1. Ruta de las cabañas pasiegas (8 Km): desde la plaza de San Roque, esta ruta de dificultad media que transcurre por carretera, pistas y caminos, permite conocer algunas de las más de 800 cabañas pasiegas y praderías que se reparten, en forma de barrios diseminados, por todo el municipio. 2. Senderismo por las cumbres pasiegas (13 Km): partiendo de La Concha, este itinerario atraviesa, durante más de cuatro horas, una zona intensamente karstificada y ocupada por cabañas brenizas, hasta llegar al magnífico Hayedo de Haza Mina y cumbrear posteriormente la divisoria Pas-Miera, hasta llegar al Portillo de Ocejo, único paso natural entre ambos valles. 3. San Roque en bicicleta de montaña (30 Km): siendo el punto de salida-llegada la plaza de San Roque, transcurre por carreteras y caminos, y visita Merilla y Carcabal, alcanzando la divisoria Miera-Pisueña.